Investigación, análisis y opinión del humanismo contemporáneo


Michael Gazzaniga: Nuestras decisiones se basan en ilusiones y falsas memorias

"Debe entender que nuestra manera de ser se debe a la naturaleza del cerebro, que ahí es donde se construye lo que somos", me insiste el director del Centro de Neurociencia Cognitiva del Dartmouth Collage. "Pero la mente también coacciona nuestro cerebro del mismo modo que los automóviles se ven coaccionados por el tráfico que ellos mismos generan", afirma en '¿Quién manda aquí? El libre albedrío y la ciencia del cerebro' (Paidós). No es un consuelo, pero sí lo es que haya debate entre las distintas posturas, desde las más deterministas hasta los que afirman que lo que pensamos varía nuestra biología (Lipton).
Por Ima Sanchís | LaVanguardia | La Contra | setiembre 3, 2012

Michael S. Gazzaniga (1939) profesor estadounidense de psicología en la Universidad de California en Santa Bárbara, donde dirige el nuevo centro SAGE para el estudio de la mente. Es considerado el padre de la neurociencia cognitiva.



Tengo 72 años. Nací y vivo en California. Estoy casado y tengo 6 hijos y 17 nietos. Es peligroso que los humanos dependamos de las estructuras sociales, porque el individuo se vuelve irresponsable, como un niño. No tengo creencias, pero el 95% de las personas las tienen.


Mis sesos son yo?Sí, su cerebro es lo que genera la mente con sus pensamientos y sentimientos.

Y los pensamientos surgen de la mente...Estén donde estén, están generados por un proceso del cerebro, pero la capa mental es real. Es como hablar de hardware (el cerebro) y software (la mente), uno sin el otro no tienen sentido y su interacción es lo que produce la función.

Entre otras cosas la conciencia de nosotros mismos.Sí, y toda la gama de actividades sociales, estados mentales, y todo lo que somos.

¿Nuestros pensamientos pueden variar nuestras redes neuronales?Va al revés, las neuronas producen la capa o el nivel mental, que a su vez delimita las neuronas. La neurociencia antigua decía que A produce B y B produce C. La neurociencia moderna piensa que A produce B, y B vuelve a A y la influye.

¿Por qué una persona es más inteligente que otra?Todos los neurólogos están intentando responder a su pregunta y nadie tiene todavía una respuesta. Si la inteligencia es ser bueno en el pensamiento abstracto, se trata de cuántas variables puedes mantener en tu mente, lo normal son 4 o 5, y las personas muy inteligentes en este sentido pueden tener 6 o 7, pero esta es sólo una línea. Estamos hablando de personas que tienen una buena memoria a corto plazo.

¿Qué otras hipótesis se barajan?Que las personas inteligentes tengan una estructura neuronal distinta. Pero una de mis conclusiones más trascendentes es que hablar de libertad de acción empieza a no tener sentido.

¿Estamos determinados?Para empezar, hay que entender que una célula humana funciona de manera automática, como funciona su teléfono móvil.

Y, según usted, el cerebro también es un mecanismo.Sí, que toma decisiones mezclando la información heredada y la aprendida. Y resulta que en el hemisferio izquierdo humano hay algo muy especial a lo que yo llamo el intérprete.

Eso es nuevo.Este módulo neuronal intenta interpretar el mundo y las propias acciones del sujeto, intenta contarnos la historia de por qué hacemos lo que hacemos, de manera que toda esa argumentación mental que nos parece fruto de nuestra lógica particular...

... Es obra del intérprete.Sí, y este descubrimiento nos lleva a la conclusión de que la libertad de acción es irrelevante e inexistente. Pero eso no significa que usted no sea responsable de sus actos.

¿Cómo que no?Porque la responsabilidad es el acuerdo que tomamos todos nosotros, está en lo social. Pero permítame que le cuente una historia.

¿De su intérprete?Tiene que ver con él. El primer científico en decir que el cerebro estaba hecho de neuronas fue Ramón y Cajal, pese a que Golgi fue el primero en ver una neurona, pero como tenía una teoría distinta sobre el cerebro no la tomó en cuenta, ja, ja, ja.

¿Qué le hace tanta gracia?Hasta qué punto si uno no quiere, no ve una cosa, aunque la tenga delante no la ve.

El intérprete.Así es, una herramienta humana muy potente que es la que nos hace estar tan seguros de lo que decimos y pensamos.

¿Y lo que sentimos?Usted se va a la cama perfectamente feliz, pero se levanta hecha polvo y entonces se dice: "¡Ah!, es que no me apetece ir a trabajar" o "es que mi pareja no me ha dado los buenos días".

¿Mentirijillas del intérprete?En realidad lo que ha pasado es que ha cambiado su nivel de dopamina.

Vaya, que no nos podemos fiar ni de nosotros mismos.Un ejemplo muy claro es un ataque de pánico o una fobia, hay una parte del cerebro que te da un impulso, llegas a un nivel de ansiedad brutal porque el intérprete te ha contado una película irreal que para ti es absolutamente real.

O sea, que tenemos un Pepito Grillo grillado.El intérprete intenta responder al porqué y al cómo incluso a costa de inventar falsas memorias. Estos descubrimientos tienen enormes implicaciones para entender nuestra conducta.

Me ha dejado perpleja.No sólo más del 98 por ciento de nuestras decisiones son inconscientes, sino que, además, de las pocas decisiones conscientes estas se basan en construcciones que a su vez están basadas, en gran parte, en ilusiones y memorias falsas. Y hay más.

A saber.Para cuando tú eres consciente de tu pensamiento, tu cerebro ya lo ha ejecutado. Ya ve, todos sus procesos mentales, incluyendo la sensación de tener una mente y un yo, son fruto de su cerebro.

¿Y ahora qué hago?Nuestra visión de quienes somos está cambiando y cambiará todavía más a medida que hagamos nuevos descubrimientos, y debemos estar atentos, porque organizamos nuestra sociedad en función de lo que creemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario